Empatía

Él lloraba amargamente, yo le daba palmaditas en la espalda y guardaba silencio. Quería decirle que no sufriera, que comprendía su sentimiento.

Apenas hace unas horas había descubierto que Ella ya andaba con el maestro de francés. Le tuve que decir. Comenzó a llorar suavemente, como un niño cansado que no sabe si seguir sollozando o dormir.

Tranquilo amigo, sé cómo te sientes, tus dolores, sé cómo la querías, cómo la amabas.

Sufro al ver cómo la recuerdas, cómo deseas abrazarla, verla sonreír de nuevo, bañarte en su risa espontánea y pacífica, mirarla a esos ojos suyos almendrados y hermosos como la locura, atrapar su cabello entre tus dedos y jugar con ellos, tocar levemente su piel para des-encadenar un escalofrío por su cuerpo, saber que estás a su lado y que Ella lo está también.

Ir a su casa y platicar largas horas, ver una película y no verla por su risa , quedarse acostados en un parque escuchando música y viendo a las personas pasar, tener esos juegos que sólo ella entiende y que sólo a ella le dan gracia, saber que hay alguien que te escucha y que te entiende, que hay alguien a quien no le importa si te quedas callado, que te da un beso cariñoso en la mejilla en el momento menos esperado, esperar largas horas su aparición en el internet para seguir hablando, sí amigo, sé como te sientes, sé cómo la amabas... lo sé.

los amantes

-¿Quieres venir a mi casa?, mi papá se fue y estoy sola.

Hija de su madre, si no estuviera tan buena la mandaría a la chingada. Pero ahora estoy afuera de su casa, me bañé y me lavé bien el pito, digo, para qué me hago pendejo, ya sé para qué me mando ese mensaje la zorra, también le robe unos condones a mi hermano y me cambié los calzones, no puedo usar los de Power Rangers en estos momentos.

Tocar el timbre, esperar a que abra, poner cara de galán y pasar , sí zorra, sí me quiero sentar, sí perra, sí quiero un vaso de agua, sí barata, sí he estado bien... sí, sí, sí... Oh aquí viene algo interesante, sí, sí me puse un poco de perfume, huélelo si quieres. Huele rabalera, huele...

Agarre sus cabellos mientras me besaba el cuello, comencé a prenderme. Baje las manos por su espalda y le agarre el culo, ¡Qué sabroso culo tiene la maldita! Se lo sobé mientras ella gemía bajito.

-Vamos a mi cuarto.

Me tomó la mano y me llevo hasta las escaleras, mientras subía enfrente de mí no podía dejarle de ver el culo, pensar en como me lo iba a comer en un rato.

Llegamos a la cama y me metió la lengua en la boca...

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Me había aburrido de las cosas que escribía y quise intentar algo diferente, jajajaja, pero creo que para escribir guarro hay que tener un talento especial, en fin... disfruté lo poco que escribí quizá otro día lo siga.

Saludos...

ne me quitte pas

Madurar gustos, madurar pensamientos, no se si voy para adelante, atrás, a la derecha, a la izquierda, arriba o abajo, en diagonal o en zigzag, corriendo o gateando,arrastrándome o volando.

Las ideas no me son tan lúcidas como antes, ya no son tan fáciles de atrapar como simplemente estirar la mano, ya no me vienen a montones ni en piara.

No he terminado un libro en meses, y ultimam ya no termin cas nad d lo qu hag..

pensá-mí-en-tos

Y pasa que las palabras no me vienen, está la emoción, está el sentimiento, está el pensar; está ahí, pero no me cae aquí.

La cabeza se me llena con aires y aguas, los ojos con formas y carnes, la boca con cuchillos y venenos, las manos de roces y dolores.

Ser el otro para no sentirse solo y volver a ser éste para no sentirse culpable de lo que dijo e hizo.

Bajar la guardia y dejarte sentar en mi pecho, dejar que pases tus manos por mi rostro, que me dejes tu vaho en la nariz, ese de azufre y podredumbre.

No saber cuándo terminar, no saber cómo empezar.

Cargar con los recuerdos que ya no sirven, pero guardados como detonadores de sensaciones y emociones que se quieren re-encontrar.

Hablarte de mí, que me hables de ti, que me dejes entrar en tu mente y tus deseos.

Sacarte de ti y meterte en mí.

Encontrar en tus silencios mis felicidades, saber que estás pero que no lo estarás.

Volver a no tener un orden, no, no, no, no, no(tres puntos)

(no)(otro punto)

cleptomanias

-Deja de quitarme las palabras de la boca

-Tú que las robas de la mía...

las imperaciones

Tírame, arrástrame, patéame, muérdeme, aráñame, sométeme, insúltame, úsame como a tu paño de mocos, finge que no pasa nada, que todo sigue igual, que no sientes ganas de asesinarme, ríe fríamente, olvida lentamente... planea venganza.

Pero por favor, hazme sentir algo que no sea esta culpa vacía.

Las pre-disposiciones

Surgió de entre los arbustos y me llené de pánico: nariz enorme, cabello grasoso y sucio, rostro horrible, dientes grandes y disparejos, aspecto hosco y hostil; todo un monstruo. Caminó hacia donde estaba y se sentó en la banca de a mi lado, sus ojos inyectados enfocaron los míos.

Quise correr, pero parecía no querer hacerme daño. Aun así pensé: "Debe ser extremadamente cruel", "tiene que alimentarse de sus víctimas vivas para estar satisfecho", "es un des-piadado, des-almado, des-humano".

Volvió a mirarme, lucía nervioso.

"Es una horrible criatura", "sólo se dedica a destruir a las personas, eso hacen siempre", "tomará mi dinero".

Miró su reloj y tamborileó en la banca.

"Es un perezoso"

Estaba a punto de decir la última verdad de él, "un rufián", cuando una mujer se le acercó.

Al monstruo se le iluminó el rostro, la hilera de amarillos dientes apareció en una mueca de alegría, la sangre amontonada en su morena y curtida piel. Un mar de amores y alegrías surgió de él. Se paró de la banca y la abrazó fuertemente para luego darle un beso en la frente.

Se fueron tomados de las manos.

No era un monstruo a final de cuentas. Volteé a mirar las palomas del parque y me arrojé sobre una para devorarla.

Y no te encuentro

A falta de alguien, te voy a inventar,a hacerte de pedazos de memorias, de retazos de sentimientos, de restos de deseos...

Y de nuevo sentirse fuera DE, pequeños nervios y sustos. Dolores fantasmas y quejas despreciables (¿para llamar la atención?).

Volver a ver a las personas como objetos, ¿porque esta in-sensibilidad de nuevo?

Miedo de ti, miedo a quererte, a que me quieras, quererte sin que me quieras, quererme sin quererte.

pretextos

No te quiero por lo que eres, dices, quieres o llegas a ser (y es que a veces eres mucho).

No, te quiero porque me dio la gana, porque necesito hacerlo, porque quiero quererte.

Pensarte es lo que necesito, no tus abrazos, besos o caricias.

Imaginarte es lo que (lo que, lo que, lo que, lo que) mantiene mi cerebro activo, no tú .

Los celos de que alguien más te piense, te tenga, te haga reír no son EN ti, son por... (¿porque?).

Me gusta más pensarte como quiero, moldearte a mi manera; hacerte y des-hacerte. Darte reset y amarte de nuevo, amar tus fotos, tu imagen y mi pensamiento de de ti. Amar la idea de alguien que no eres, pero que tanto me gusta pensar que sí.

Porque cuando estás junto a mí, no te siento de la misma manera que cuando no lo estás, como una forma di-fusa, di-stante, di-ferente.

Pero apenas paso un rato contigo olvido mis pensamientos, me dejo llevar por ti y tu sonrisa, caigo en ti, y soy feliz por un ratito, al menos hasta que te vas y vuelvo a pensar que no, que no te quiero y que no soy feliz por ti, sino por mí.

Mi conciencia colectiva (que espero signifique lo que creo significa) últimamente me anda jodiendo demasiado.

romances

Y a veces me da por ponerme romanticón. Imaginarte frente a mi, decir palabras dulces mientras recorro el borde de tu rostro con mis dedos, bajar lentamente hasta tu mentón, alzarlo suavemente como quien quiere atrapar una pluma que cae lentamente. Acercar tu rostro, poder observar las pequeñas imperfecciones de tu piel. Deslizar mi mano hasta tu nuca y clavarla entre tu cabello. El corazón acelerado, sentir esa suave carnosidad...

Otras tantas me da por ponerme facineroso, ya sabes, de pronto imaginarme cómo lloras con desesperación y se te escapa entre gimoteos un: "por favor, no era en serio". Voltear y decir con desprecio: "a callar maldita". Alejarme de ahí mientras siento ese gozo que uno experimenta cuando lastima a la persona querida, sólo para poder ver las lágrimas correr, para herirse uno mismo en ella.

Reír para los adentros, sentir como acabo de asesinar una pequeña parte de mi ser. Detenerme en mi andar, voltear la mirada, verte ahí mismo donde estábamos hace unos minutos, verte des-hecha, verte en mí, verme en ti.

Regresar y decir que no es cierto, que a veces soy muy idiota, pero esta vez no aceptas mi abrazo, me alejas, dices cosas como "te desprecio, lárgate", y te abrazo más fuerte, y entonces te resistes más, pero nadie cede; yo queriéndote querer, tu queriéndome perder.

Olvido el porqué me había enfurecido contigo, sólo sé que yo tengo la culpa, que tú no pudiste haber hecho nada para herirme, yo soy el gran tonto. Pero el camión llega a la parada y el tiempo de fantasear se acaba, la ilusión se des-hace y te me vas con ella.

Sí, a veces me da por ponerme romanticón.

miedo

Tengo miedo de comerme mis pies, de pronto los veo (aunque no estoy muy segura de que tenga la condición de llamarlos pies) y me entra un deseo tan inmenso de comérmelos que no se si lo pueda controlar, es como si estuviera predestinada a hacerlo...

-Serpiente con complejo de ouroboros.

Insensibilidad masculina.

04/09/10

Y me pregunto por qué es tan insensible, nunca hay una caricia, una palabra dulce, al menos un "gracias". Siempre se va directo a mis senos; los aprieta, los jala y no me deja hasta que está satisfecho. Lo peor de todo es que en cuanto termina conmigo se va con otra, siempre quiere más.

Una ves que está satisfecho se va tarareando y nos ignora hasta el día siguiente, dejándonos tan solas y adoloridas.

Hay veces que quisiera huir, pero sé que sin él no puedo vivir.

Estoy tan triste.

-Diario de una vaca lechera.

sin titulo 2

A la mierda entonces.

pensamientos acerca de mi pubertad

Me han dicho que es por la hora, porque soy un amargado (se repite el epíteto) , por la luna, por una falta de vitamina C , por una falta de amor, por un burro en mi pasado.

Pero eso no es lo que me causa molestia , es el hecho de que estoy volviendo a lo mismo :

Pensamientos un poco paranoicos, un poco pesimistas. Actitudes un tanto misantrópicas, un tanto mecánicas. Leer para pasar el rato, el Facebook para perder el que no pasé leyendo, pensar en Ella para pasar el que me sobra. Imaginar los what if... soñar con los I wish I could... Pensar en mí, para poder pensar en ti. Saber que no es verdad, que te me vas y no me esperarás (no ésta vez).

Sonreír con tus chistes sin chiste. Agradable y desechable. Dejarme moldear y des-hacerme al llegar a casa.

Estas son cositas sin importancia que me molestan de tanto en tanto y que se me pasan después de el último tanto. Pero mientras tanto, escribir un tanto para que ya no me joda tanto el sentimiento de hastío que tanto me da , dicen que por la hora, que por amargado, por la luna, falta de vitamina C, falta de amor... o un burro en mi pasado(punto)

vámonos a santo wee....

Y (esta forma de empezar un escrito me empieza a agradar) de pronto estábamos ahí, cada quien por su propia razón, pero todos juntos ahí.

Un comentario tonto. Reír .

Un contacto físico in-necesario. Reír.

Un comentario obsceno. Reír.

Un silencio incomodo. Cruzarse de brazos, suspirar, voltear hacia otro lado(como queriendo encontrar a alguien a quien saludar y así sentirse pretenciosamente popular), voltear hacia el otro, ver de nuevo al centro del "circulito" asentir con la cabeza mientras se aprietan los labios en una sonrisa que no tiene una razón de ser, volver a suspirar.

Un comentario tonto. Reír.

Un contacto físico in-necesario. Reír.

Un comentario obsceno. Reír.

Surge el conocimiento (you realize. Hay veces que parece que una palabra en otro idioma engloba toda la idea que quieres decir, cosa que no puedes decir en tu propio idioma, sin desdeñar el idioma, claro, porque el idioma es muy bonito) de que todo es una bonita máscara. Encorvar la espalda, cruzar las manos , si se está sentado, sobre las piernas, si se está de pie, ponerlas detrás de la cabeza. Fijar la mirada en el suelo o hacia un punto vacío detrás de la cabeza del que tengas enfrente. Pensar en el porqué hacer eso, porqué las vinculaciones sociales que uno se carga siempre están definidas por aquella pequeñita cantidad de idiotez. Imaginar si es eso lo que uno busca, si son las personas con quien se desea estar. Aparentar a veces, mentir otras.

Un comentario tonto. Reír.

Un contacto físico in-necesario. Reír.

Un comentario obsceno. Reír.

Alguien dice que se tiene que ir a casa, los demás dicen "si... yo también" , pero se tiene que agregar una pequeña oración , nadamás para verse guay, usualmente sólo es un comentario como "que Weba", " voy a llegar a dormir", " voy a salir con unos amigos".

Un comentario tonto. Reír.

Un contacto físico in-necesario. Reír.

Un comentario obsceno. Reír.

Besito, besito, más besito. Apretones de manos, apretón, apretón. Besito, besito, besito. Abracito, abracito, abracito.Chao

¡Felicidades! ¡Ganaste la lotería!

El hombre despertó mientras su esposa le sacudía el hombro y le gritaba:

-¡Felicidades! ¡Ganaste la lotería!

Apenas estaba saliendo de la mezcla de sopor, sorpresa y alegría, cuando volvió a ser despertado mientras su esposa le sacudía el hombro y le gritaba:

-¡Felicidades! ¡Ganaste la lotería!

Un pequeño sentimiento de curiosidad se mezcló con la alegría en el momento que volvía a ser despertado mientras su esposa le sacudía el hombro y le gritaba:

-¡Felicidades! ¡Ganaste la lotería!

La curiosidad desapareció de entre sus emociones, y una naciente sensación de pánico lo tomaba mientras su esposa le sacudía el hombro y le gritaba:

-¡Felicidades! ¡Ganaste la lotería!

Cien despertares después, el hombre ya hastiado y aburrido, se preguntaba cuándo demonios se supone que iba a despertar

topes

Toc, toc. ¿Cómo caí en esto?

Toc, toc. Mi deseo de satisfacer mis necesidades, mis sensualidades.

Toc, toc. Fui atraído con dulces aromas, promesas de placer, emoción insoportable.

Toc, toc. Pero ahora no puedo salir de aquí.

Toc, toc. El saberme atrapado es más desesperante que este dolor.

Toc, toc. Al menos los gigantes no me prestan atención.

Toc, toc. El dolor aumenta. No puedo salir de esto. Esta pared invisible que no me lo permite. No puedo parar. Tengo que seguir.

Toc, toc. Ya no puedo detenerme, es casi como algo mecánico. Tomar impulso, avanzar, golpear y caer, tomar impulso , avanzar, golpear y caer, tomar impulso...

Toc, toc. Casi ciego, miembros que no responden. Debo seguir.

Toc, toc. No veo, no siento, no... no ...¿qué estoy haciendo?

Toc... toc . Los espasmos en mis patas ya no se detienen, mis alas ya no se mueven, ¿Porqué el golpear es lo único en mi mente? y más importante , ¿qué era esa pared invisible?

01/01/10

(primera entrada en un diario escrito desde el 01/01/10)

Estamos encerrados , pero decidimos estar aquí por testarudez? idiotez? fe? . Cada quien tiene sus razones, sus intereses ocultos , o quizá no tan ocultos.(me inclino por el miedo)

la rutina nos hace olvidar que estamos cansados, que tenemos miedo , que somos estúpidos. Nos hace añorar y querer huir, de alguna manera, realza nuestros deseos e instintos.

Hazle reverencia al pecado, sonríele, dale la mano, un lugar en tu casa, en tu cama. Invítale una taza de chocolate y háblale de tu vida. Verás lo lindo que te la pasaras: blasfemando, riendo por reír, criticando, embriagándote con licor barato, compartiendo sudor y lágrimas . Pecar por pecar, sufrir por sufrir. Quizá sabes en lo que te estás metiendo, quizá no. Pero así eres feliz pequeño masoquista.

Las relaciones se basan en conocerse unos a otros , pero cuando se conoce demasiado a una persona... te sientes bien porque lo conoces o por pura costumbre?

(una hemorragia de gozo, palidezcamos, desangremonos , perdamos la lucides, el conocimiento)

Creemos dar demasiado y creemos que merecemos pedir, jajaja, merecemos .

A la ardilla en mi cabeza le gusta leer revistas y ver la TV.

Nos reímos de nuestras sombras.

La liebre no se quedo dormida, la tortuga le hecho algo a la sopa.

Me marcare por mis pecados?, respóndeme querido Henry. Seré reconocible al menos para mi?, o tendré que ponerme un gafetito?.

Al perder la ignorancia se me pedirá más.

Pensar en el fruto de lo que podría pasar es como un puñetazo, pero no se porqué deseo que golpeen más;quiza así se me cierren los ojos.

nostalgias

Escrito un día de depresión y homesick tras haber vuelto de casa al seminario.

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Creo que no me equivoco si digo que esa noche todos estábamos algo decaídos , un poco como queriendo recordar algo antes que se borrara de las mentes y fuera reemplazado por la rutina y el horario. En lo personal, no tenia demasiado que recordar. Sólo una hora sentado en el zócalo de mi ciudad leyendo algo que honestamente no entendía (pero ché no querés terminar el libro? ) y tomando un jugo que cada vez estaba más caliente.

Me parece que unos sólo deseaban dormir. Otros sólo deseábamos pararnos bajo la lluvia y mirar hacia arriba , así no se darían cuenta .

Desafortunadamente ( oh cielos, siempre he pensado que esa es una palabra demasiado larga) no llovía y nos aguantábamos las ganas. Cierra los ojos y finge sólo un poco más , debajo de las sábanas nadie se dará cuenta .

Subimos hacia los dormitorios moviendo nuestros cansados y entumidos cuerpos por las horas de viaje ,hacíamos aquel acto mecánico repetido cientos de veces...

Sí, debajo de las sábanas nadie se da cuenta , y además , te evitas resfriados molestos...

Buenas noches, nos vemos al otro día , y al otro...y al otro...y al otro...

dime que me quieres...

-Dime que me quieres...

-Sí, te quiero

-Dímelo de nuevo-dijo la chica jugando con el cordón del teléfono y con una sonrisa coqueta en el rostro -me encanta cuando me lo dices...

-Sí querida, te quiero - dijo el chico levantándose lentamente de el suelo, pues sentía las piernas entumidas- pero ya llevamos 3 horas hablando, tengo que colgar o mis padres me regañarán.

-Uhm... está bien -suspiró la chica con cara de reproche.

-Nos vemos en la escuela mañana ¿vale?- le dijo con una amplia sonrisa.

-Esta bien... mmm... quería decirte algo muy importante .... pero creo que mejor te lo digo mañana - dijo ella.

-¿Hasta mañana?- dijo con curiosidad - no, mejor dímelo ahora , por favor...

-Mmm... está bien , pero primero dime que me quieres -dijo cerrando los ojos con fuerza.

-Sí cariño, te quiero.

La chica alejó el teléfono de su rostro y tomó una bocanada de aire y sintió como un escalofrio recorrió todo su cuerpo . Acercó sus labios al teléfono y dijo suavemente:

-Te amo...

Esperó ansiosa una respuesta , pero sólo escuchó silencio al otro lado de la línea.

-Y bueno... ¿Qué dices?- preguntó tímida.

Pero esta vez sólo le respondió es sonido intermitente del teléfono al colgar. La chica sintió en su interior bullir un rencor increíble .Le había abierto su corazón , y tuvo que reunir mucho valor para decirlo algo tan importante , y él ni siquiera se había dignado a contestarle, era un cobarde. La chica colgó con fuerza el teléfono y subió a llorar amargamente a su cuarto.

Al otro día el chico caminaba con un amigo por el pasillo de su escuela cuando se cruzaron con la chica

-¡Mi vida!-dijo él -te estaba buscando, ayer....

Pero no pudo terminar la frase , pues se encontró con los ojos llorosos de la chica que le gritaba:

-¡ Cállate maldito!, ¡No me vuelvas a hablar nunca! , ¡TE ODIO!.

Después , se alejó rápidamente cerrando fuertemente los puños. Los chicos se quedaron sin moverse en donde estaban parados , pasada la impresión , el amigo dijo :

-Wow, tu chica si que es extraña

-No lo sé , nunca se había puesto así...

-¿Pues qué hiciste?

-¡No lo sé! , ayer simplemente me dijo: "dime que me quieres..." y luego se fue la luz en mi casa...

ἰχθύς

Seid nüchtern und wachet; denn euer Widersacher, der Teufel, geht umher wie ein brüllender Löwe und sucht, welchen er verschlinge.

Las personas d

icen que en momentos como éstos recuerdas toda tu vida. Creo que yo no lo hago porque en si, la mía no tuvo mucho sentido hasta que llegué al Oasis del Ictus. Por eso que los recuerdos que vienen a mí son desde que llegué a él y cuidar del pozo se volvió mi vida.

Mi ingreso fue simple y sin tanto alboroto. La primera impresión que tuve del Oasis fue de un lugar tranquilo, con altas palmeras de dátiles, abundante vegetación y una brisa siempre fresca. Ahora que lo pienso, me pareció un lugar un poco fuera de la realidad. Quizá porque habiendo tanta vida en él, apenas uno cruzaba los últimos pastos todo se tornaba seco y sofocante, haciéndome perder la paz y provocando en mi interior un bullir de sentimientos de soberbia e indiferencia inexplicables.

Concretamente lo que hacíamos yo y el otro ciento de personas que vivíamos en el Oasis era cuidar del Pozo, aunque más de una vez pensé que era él el que cuidaba de nosotros. Seguíamos un horario que nunca daba pautas al cambio, cómo olvidarlo : levantarse, ahuyentar al León, desayunar, cuidar del Pozo, comida, arreglar y limpiar las tiendas donde vivíamos, cenar y dormir.

Algunos fines de semana venían personas a tomar un poco de agua del Pozo. En esos días, el León se ponía furioso y daba vueltas azotando su enorme cabeza contra las palmeras y la hierba. A pesar de todo, nunca se acercaba.

Unas semanas después de mi llegada vimos a uno de nosotros caminando con el León, en su cara se dibujaba esa expresión que indicaba su cercana victoria. A nadie le extrañó que el tipo no regresara de su última ida al pueblo, todos sabíamos que el León se lo había devorado. Con su ausencia algunos encontraron un motivo para alegrarse, al parecer, ya se habían cansado de su fanfarronería y orgullo excesivo.

Hicimos lo que siempre se hacía cuando alguien se dejaba devorar : ir a su tienda, guardar su ropa en una bolsa, quemarla junto con el resto de sus cosas y luego fingir que él nunca existió.

Que ese hombre hubiera preferido ser devorado a estar con el Pozo fue para mí de lo más extraño, pues a pesar de llevar poco tiempo en el Oasis, yo ya empezaba a quererlo y apreciarlo. El pozo era lo más importante para mí y depositaba en él todos mis sueños, esperanzas y temores. Disfrutaba cada día que pasaba con él. Eramos los mejores amigos. Poco a poco empecé a amarlo, y nuestra relación era tan íntima que pensé que había encontrado en él el sentido que tanto había estado buscando en mi vida.

Pero los meses pasaron y no sé qué sucedió. Probablemente por la rutina diaria comencé a descuidarlo y de pronto, un día mientras caminaba por los alrededores del Oasis, me quedé observando el desierto. Sabía que no debía, que estaba prohibido hacerlo, pero no pude evitar quedarme toda esa tarde admirando su silencio y brillo, uno que no había visto antes en él. Algo en mí deseaba ir y revolcarme en la arena, quedarme ahí y no importarme ni el Oasis con sus palmeras y su frescura, ni los demás o el León- que ahora estaba recostado a mi lado, ronroneando casi como con gusto- ni siquiera importarme el Pozo.

Desde ese día buscaba cualquier pretexto para escabullirme del horario e irme a sentar a la orilla del Oasis para observar el desierto con ese brillo que me parecía tan hermoso.

El León pasó a tomar el lugar del Pozo. Al principio lo ahuyentaba, pero después de un tiempo dejé de hacerlo y su compañía empezó a serme agradable. Cada vez nos volvíamos más cercanos. Recuerdo una ocasión en que caí dormido sobre su ancha espalda, soñando con el desierto y la hermosura de su brillo.

Esta mañana desperté en mi tienda, que ahora era un completo desorden, salí de ella y ahí afuera estaba el León acostado. En cuanto me vio se levantó y sonrió.

-Vamos pues- le dije con un suspiro- en el fondo, sabía que hoy no nos quedaríamos sentados a la orilla del Oasis.

Al pasar junto al Pozo oí la voz de alguien que me suplicaba que regresara. También sentí cómo el Pozo me llamaba dulcemente a pesar de la manera en que lo había abandonado. Pero su invitación era inútil, en mi corazón sólo estaba el desierto, además que sentía demasiada vergüenza para regresar con él.

Al llegar al borde suspiré ansioso y me dejé guiar por el León.

Ahora recuerdo estas cosas mientras la arena calienta quema mis pies y el dolor hace que por primera vez en mucho tiempo reflexione. Pero ya es tarde, el León ahora ruge eufórico por la excitación de su victoria, una euphoria pasajera, él nunca se está tranquilo, y en cuanto acabe conmigo regresará a buscar alguien más que se deje devorar.

Sin titulo 1

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-¿Mi primer beso?- dijo más como una pregunta para sí mismo que como una respuesta hacia mí.

Una leve sonrisa apareció en su rostro, como de alguien que escarba en su pasado para encontrar aquella vieja aventura de la juventud.

-Sí, lo recuerdo, fue en 1º de secundaria - suspiró al tiempo que ponía la mano en su mentón y miraba hacia un punto perdido, o quizá miraba a la pareja de la mesa de atrás que hablaba francés va te faire enculer! y se reía escandalosamente- en ese tiempo no me peinaba, usaba unos lentes horribles y también tenía brackets; además de un problema de acné terrible.

Volvió a sonreír y miró hacia su taza de café vacía. Una chica se acercó y volvió a llenársela. L... tomó un sorbo y continuó:

-Se llamaba T... era la chica más genial, o al menos lo era para mí, que hubiera conocido. Tenía el cabello chino y lo usaba suelto y largo, vestía muy a la moda de entonces y era bonita. Y lo mejor de todo: tenía un piercing.

Yo nunca le había visto a nadie una perforación, en esos tiempos era rarísimo, no como los chicos de ahora que parecen alfileteros de tanta perforación que traen. Sí, esa chica era genial.

Tomó un poco de azúcar y se la puso a su café; mientras tanto, tomé un bollo y le unté mantequilla, estuvimos un rato en silencio y luego continuó:

-¿Sabes R...? Creo que fue mi primer amor, pero yo nunca creí tener esperanza de tener una relación con ella algún día.

L... volvió a sonreír y a poner la mano en su mentón mientras fijaba de nuevo su mirada en algún punto perdido (quizá miraba al grupo de amigos de la mesa de al lado de la rocola) revolvió lentamente su café y empezó a decir:

-Pero un día ella llegó y me dijo que le gustaba. Me quedé realmente pasmado- dijo, con los ojos muy abiertos y poniendo las manos a los lados de su cabeza- incluso me dijo que si quería ser su novio- se recargó en el respaldo de la silla y cruzó las manos sobre su vientre - claro, yo acepté en seguida.

Entonces ella me abrazo y acerco su rostro al mío, yo había visto en las películas que la gente cerraba los ojos, pero cómo demonios se supone que me iba a perder ese momento. Quería recordarlo todo- frunció el ceño- no sé qué idea tenía de un beso, pero no fue para nada lo que había imaginado. Creía que sentiría algo mágico o algo por el estilo, pero solo sentí húmedo y el piercing de su lengua contra mis dientes...

L... paró y una expresión de dolor, como cuando te pisan el pie por accidente, apareció en su rostro.

-Sí, y ahí fue cuando pasó: su piercing se atoró en mis brackets. Creo que ha sido la cosa más vergonzosa de mi vida. Recuerdo que la directora llamó a nuestros padres.

Imagínate que lleguen tus papas y te vean pegado con una chica. Estoy seguro que mi madre, a pesar de su semblante serio, estaba muriendo de risa- dijo.

Yo solté una carcajada (así como la de los que hablaban francés en la mesa de atrás) y los amigos de la mesa de al lado de la rocola se me quedaron viendo con curiosidad.

-Sí - dijo él - mi primer beso fue horrible.

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atencion:no me paso a mi...digamos que le paso al amigo de un amigo..